Celler Rendé Masdeu, la añada del 2020 será la mejor, sin duda

En el transcurso de nuestras vidas, siempre aparecen desgracias que nos hace perder personas, bienes, salud y la ilusión. Así es la vida tropezar, caerse, levantarse y luchar por nuestros sueños.

Uno de los motores de nuestra existencia es la ilusión.

La ilusión está estrechamente unida a los sentimientos. Esla capacidad que poseemos las personas para reunir todas nuestras fuerzas y concentrarlas para conquistar un objetivo.

Ilusión es una palabra que procede del latín ilusionis y significa engaño. Porque así es la ilusión, es ese don que tenemos los seres humanos para creer en aquellas cosas que no vemos, pero que nos ayudan a vivir.

Pues de esa ilusión de probar la añada del 2020 del Celler Rendé Masdeu os quiero hablar.

El martes después de un día normal de trabajo en la bodega, Mariona Rendé y su marido, Jordi Roig, ilusionados con la recién vendimia, habían ido para casa, cuando el río Francolí, justo al lado de la bodega Rendé Masdéu, se lo ha llevado todo, barricas, depósitos botellas, paredes, no ha quedado nada en pie. Una intensa lluvia de más de 250 litros por metro cuadrado les arrebato esa ilusión de la nueva añada, de su forma de vida, en 10 minutos la fuerza del agua ha arrasado con todo, ni las paredes han podido aguantar la fuerza del río desbordado.

La ilusión está conectada a emociones positivas. Cuando nos ilusionamos nos sentimos bien, nos sentimos motivados y plenos. Nuestra mirada cambia, nuestro estado emocional también, estamos entusiasmados y cargados de energía. Es un sentimiento que nos da fuerza.

Esa fuerza, esa compañera vital es la que necesitan Mariona y Jordi, el golpe es muy duro, pero el pueblo de una manera voluntaria les ayudo a recuperar las botellas de vino que habían quedado en los restos de la bodega, la Denominació d’Origen Conca de Barberà. junto con la Festa del trepat han organizado una colecta solidaria para comenzar de nuevo, el sector del vino se ha volcado para solidarizarse y ofrecerles ayuda.

Desde pequeños las ilusiones nos ayuda para construir nuestro proyecto de vida, para diseñar nuestros sueños y para fijar nuestras metas. Convivimos con ella porque es la fuerza que nos empuja a alcanzar nuestros objetivos, es nuestra fiel compañera de viaje. Con ella soñamos dónde nos gustaría ir, qué nos gustaría ser, a quien nos gustaría tener a nuestro lado o que vino podemos elaborar. La ilusión nos ayuda a hacer realidad nuestros sueños. 

Ese sueño de la familia Rendé cimentados en una tradición vinícola antigua y muy sólida, desde 1604, una ilusión y dedicación ininterrumpida a la viticultura y a la elaboración de vinos y de sus derivados.

Y aquí entra mi ilusión, quiero poder disfrutar de un Insolit espumoso en Sant Joan, un Jordiet tinto de trepat para sorprender en una reunión de amigos, un Follet Rosat para esas paellas de verano y ….. Mariona y Jordi ayudarme a conseguir mi ilusión!

¡No rendiros, llenarnos de aliento! “Nosotros” os empujaremos a conseguir vuestras nuevas ilusiones, esa ilusión que habita en los instantes de la vida que nos acercaran a esa añada del 2020!

Llum als ulls i força al braç!